sábado, 28 de marzo de 2020

Reducción al absurdo


Se educa por reducción al absurdo.

Pablo va a trabajar de Celador. Vale, y yo soy Cura. No sé, tú sabrás, nadie es perfecto.

Somos de todos los colores. ¿Adjetiva? Adjetivo. Los hay empáticos, simpáticos, concienzudos y forzudos; altaneros, dicharacheros y embusteros; carismáticos, tristes e interesados; cercanos, brillantes, explosivos y rendidos; elevados, sistemáticos y rumanos. Los más raros son los que se hacen daño y piensan que se lo hacen a los demás.

En Madrid ves nevar en Marzo y en la tele un Djordjevic peludo mete un triple. ¿Qué diría GIla de todo esto?, ¿qué idearía Berlanga?

Pablo se ha dedicado toda su puta vida a joder la marrana. En su casa se habrán preguntado más de una vez por qué; si hubieran consultado a un especialista, también se lo hubiese preguntado. Gael y José, aquí dos compañeros, y yo, pues también nos lo preguntamos. Claro que nos lo preguntamos. Todos nos preguntamos cosas y a veces no tenemos respuestas.
  
Pablo ya tosía antes del confinamiento, sí, cuando nos reíamos de los chinos y especulábamos sobre la inutilidad de los italianos. La misma que la nuestra, compadre, que somos latinos.  Tápate, Pablo, y Pablo te tosía encima. A Pablo hay que quererle y limitarle.

Desde el absurdo pescas a los chavales, no hay otra. Si les regañas, se sumergen  en el agua como sirenas. Pablo cogió el cebo y yo la caña; y también fue al revés.He de decir que el cebo sabe mal.  ¿A sardina podrida?. Puede. Pablo te ríe la gracia y uno que no es de piedra se cree que trabaja bien. Qué equivocado estás. Pablo es de esos que mete palos en las ruedas. Muchos lo hacemos de vez en cuando porque no todo es equilibrio, pero no constantemente, día tras día. ¿Educar es sencillo? Pensar que educas, sí; provocar cambios, ya te lo diré mañana. Teleducar con la voz o con un vídeo es como amar en el olvido, por ejemplo, qué se yo. Verde que te quiero verde... El caballo sobre la mar y el barco en la montaña.

Gael habla con Pablo; que hoy voy a buscar empleo, que no; que caiga un chaparrón.

Pablo duerme en la calle porque sólo se le ocurrió meter un gran palo dentro de la rueda del albergue en el que podía dormir. Por qué no joderte la vida más si es posible hacerlo.

Yo soy cura y Pablo dice que le van a contratar de celador en el Hospital de La Paz. Porque según él hay que ser muy tonto para no encontrar trabajo ahora. Por su parte la soldado Anna T no pasó el corte en El Día, ahora trabaja de limpiadora en una comisaría - Esto parece una canción de Sabina-

Mañana  será otro día, quien sabe si domingo.

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